Sus componentes tienen efectos hidratantes, desinfectantes y cicatrizantes para la piel y las lesiones cutáneas
Se acerca el verano y muchos optan por unas vacaciones junto al mar con el objetivo de buscar paz y descansar durante unos días. Ya te avisamos de que no solo descansarás y disfrutarás de un merecido descanso, sino que, además vas a poder aprovechar de los muchos beneficios que tiene el agua del mar para tu piel.
El agua del mar no solamente contiene sal, sino que cuenta también con otros minerales y oligoelementos como el zinc, el magnesio, el potasio o el yodo que también provocan un efecto antibiótico en nuestra piel, ayudando a mejorar afecciones como el acné, la psoriasis o la dermatitis atópica.
Además, basándonos en un plano estético, el efecto del agua del mar es exfoliante, dejando tu piel más suave y renovada ya que contribuye a la eliminación de las células muertas de su superficie, depurando las toxinas e impurezas que se acumulan día tras día en la piel.
Destacar que los minerales del agua de mar como el magnesio, ayudan a hidratar y nutrir la piel favoreciendo, junto a la exposición solar, la producción de vitamina D, imprescindible para que tenga una mayor vitalidad y elasticidad. Pero ¡ojo!, el agua no protege de la radiación solar, sino al contrario, el agua provoca que te quemes con más facilidad al reflejar las radiaciones, por lo que no es aconsejable exponernos de una manera continuada y proteger en todo momento nuestra piel con protectores solares.
A pesar de todos estos beneficios, desde Merz Aesthetics recomendamos todo en su justa medida ya que, una exposición prolongada, puede provocarnos irritación debido al agua salada y la exposición solar. Por ello, tras un día de playa, siempre es recomendable lavarse bien y retirar los restos de sal y arena, hidratando nuestra piel con cremas o aloe vera.
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